Bien dice este proverbio latín, disfruta el momento.
Y el día de hoy mis estimados quiero que disfruten, por lo tanto los invito a conocer el mundo mágico panadero de el pan frito relleno de leche pastelera espolvoreado con azúcar llamado pucha!
No piensen mal, no los estoy albureando, si existe! y quiero
pensar que varios de ustedes la conocen
y la han probado, otra vez recalco que es sin albur o con albur, como
ustedes gusten.
La panadería donde las venden está ubicada en esta hermosa
ciudad en la calle de Ocampo esquina con Belisario Domínguez, abren las
puertas, en el turno de la tarde a las 6:30 P.M. deben llegar a buena hora,
porque como en la vida, no hacen muchas puchas y es lo primero que se termina.
El precio es económico, la cantidad de pan FRITO! (me
encanto lo frito, #ColesterolElevadoOn) es proporcional con la leche pastelera
que hace que cada bocado sea delicioso, todo es la mezcla perfecta para hacerte
volver por más, créanme que sí.
Como dicen por “ahí” nunca es demasiada pucha.
Así que si andan de pata de perro en la tardecilla por esos
rumbos, dando el rol y disfrutando del clima guzmanense que se siente cada
día más otoñal pasen por la panadería.
Provecho mis estimados, buen viaje y espero verlos en el
camino.
http://rosameldeli.blogspot.com/2014/08/carpe-diem.html
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