De vez en cuando o casi siempre
necesitamos un buen café y platica amena en nuestra vida. La rutina diaria o el
trabajo puede distraernos de buscar tiempo para momentos relajantes, mi domingo
pintaba para ser un día de caminar por el centro y buscar un churro relleno de
cajeta y degustarlo sentada en una banca o una fuente, pero mi novio me sorprendió
invitándome a un pequeño y especial café por la calle de Pascual Galindo casi
esquina con colon, al lado del restaurant juliana y enfrente del café letras.
Sabia de la existencia de este
café por una amiga pero no exactamente donde estaba localizado, cuando llegamos
me sorprendió los detalles del lugar y que la mayoría de los muebles esta hecho
de tarimas.
La atmosfera del lugar te hace
sentir cómoda, la decoración es minimalista, la atención a clientes es rápida y
buena.
Yo pedí un chocolate caliente
irlandés y un pedazo de cheese cake. Tienen una bebida que se llama carajillo, que es cafe con licor citrico, altamente recomendable. Los precios son accesibles, aunque el
local es pequeño y las mesas están continuas sientes privacidad ya que cada
lugar tiene su espacio.
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Excelente locación para llegar a pie. |
Así que si quieren salir un rato
a despejarse la mente y dejar a un lado estrés de la vida cotidiana, ya saben a
dónde ir.
Buen viaje mis estimados, espero
verlos en el camino
http://rosameldeli.blogspot.com/2015/07/estacion-501.html
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