Mis estimados mi debilidad son los
lugares pequeños, familiares, como cenadurías, taquerías en la calle.
Pero este restaurante capto mi atención, varios amigos me habían comentado que tenía que ir para probar la bebida juliana y los pepitos.
Empecemos esta aventura gastronomica.
Pero este restaurante capto mi atención, varios amigos me habían comentado que tenía que ir para probar la bebida juliana y los pepitos.
Empecemos esta aventura gastronomica.
Localizado por la calle Pascual
Galindo Ceballos al lado de estación 501 en la zona centro de Ciudad Guzmán.
La decoración del lugar es
agradable, es algo minimalista predominado por el color blanco, para consumir
de la manera más zen nuestras bebidas y alimentos, el techo del lugar se abre por las noches y
puedes ver la cruz del templo de la merced y de fondo el cielo estrellado.
Cuando llegamos nos sirvieron
agua y la carta de las bebidas, pedimos mojito de tequila y una juliana con mezcal, de entrada una tabla de quesos.
La espera de tiempo fue media, me
gusto la variedad de quesos de la entrada, era una variedad sencilla pero buena
de quesos (queso de cabra, queso manchego, queso empanizado y una
tapa de pan con queso y plátano,
acompañado de una mermelada agridulce de tomate).
Mientras degustábamos la precopa,
pedimos el platillo numero 1 llamado “mar, tierra y mezcal” y el platillo
numero 2 “camarones empanizados” para mi gusto las dos elecciones del menú
estaban salados, la sazón fue regular, la entrada supero al platillo principal.
La atención a clientes es buena,
pero en esta ocasión había un grupo de personas presumo que son amigos del
dueño o encargado, platicando y utilizando el celular como si estuvieran en una
fiesta personal, para mi gusto eso le quita presencia o formalidad al lugar.
Así que si mis estimados quieren una buena bebida, ya saben a dónde ir.
Buen viaje y espero
verlos en el camino.
